miércoles, 15 de junio de 2011

La libertad en el cine (1)

Reproduzco el artículo de Jaume Figa "¡Grita libertad!", publicado en Cinemanet. Jaume es un buen amigo mío, además de un asiduo seguidor de este blog. En varias ocasiones me ha sugerido anuncios para la sección "Spot de la semana".

Hace poco, un amigo mío me preguntaba si sabía decirle algunas películas en las que se hablara de la libertad, con la descripción de alguna escena…; no tanto la libertad física -en grandes filmes carcelarios como Cadena Perpetua (1994)-, sino más bien libertad interior. Libertad subjetiva, por decirlo de algún modo. Sobre la marcha, le escribí un mail con algunos títulos y explicaciones al respecto. Pensé que podía ser una buena entrada para el blog. Por eso, sin pretender ser exhaustivos, aquí os lo dejo.

Terminator 2 (1991): es una de las películas que no dejan de sorprenderme. Quizá la película más profunda de James Cameron. Entorno a la capacidad que tiene el hombre de elegir su futuro y no dejarse llevar por un falso destino ciego.

La vida es bella (1997): espectacular película de Roberto Benigni, que saltó a la fama internacional y los americanos intentaron imitar con la floja Ilusiones de un mentiroso (1999). Con ella, Benigni se llevó tres Oscar, entre ellos el de mejor película de habla no inglesa. Esta película está lleno de momentos en los que se manifiesta este poder ser libre, a pesar de los condicionamientos externos. Como cuando el padre hace vivir a su hijo una vida mejor (como un concurso), para que pueda seguir viviendo como si no pasara nada (libremente). Muy bueno, en este sentido, la secuencia en la que consigue poner música clásica a través de la megafonía del campo de conentración y, por primera vez, todo se sienten más libres: el alma de cada persona es libre porque puede apreciar la belleza, incluso dentro de un lugar nada bello.

Minority report (2002): ¿Es posible predecir los delitos que vaya a cometer la gente y, por lo tanto, arrestarlos antes de que lo hagan? Es lo que plantea esta película de Spielberg (no una de sus mejores). Hay un momento en que uno de los personajes dice que ha estudiado teología y habla precisamente de esta moralidad o no de arrestar a alguien que no ha hecho nada. De modo parecido a lo que plantea Terminator 2, ¿tiene, el hombre, un destino fijo del que no se puede liberar?

Once (2006): gran película irlandesa y aún mejor música; sobre la historia de amistad y amor de una pareja que se conocen a través de la música. El amor puede venir muchas veces, pero hay que decidir que se debe o no hacer. Una vez -”once”, en inglés- es la que se elige, y hay que ser coherente con lo que se decidió. Interesante la escena en que el le pide quedarse con ella y pasar la noche juntos, pero ella se enfada y casi le echa a patadas: es como si la hubiese insultado. La libertad es mucho más que dejarse llevar por lo que más me viene en gana. La libertad implica compromiso.

Slumdog millionaire (2008): quizá un poco más cogido con pinzas, pero también está presente el tema de la libertad, el compromiso y el amor…: de lo que somos capaces de hacer y de privarnos con tal de ganar el amor de nuestra vida. En este caso, capaz de correr y arriesgar la vida y de presentarse a un concurso del que se está seguro que no ganará, con tal de que simplemente lo mire su chica.

(Continúa el viernes 17)

No hay comentarios:

Publicar un comentario